Tudela fue fundada por los árabes a principios del S. IX, llegando a ser en los siglos X y XI la tercera ciudad de la Marca Superior de Al-Andalus, pasando a depender de la taifa musulmana de Zaragoza y destacando como centro cultural de primera magnitud destacando sus escuelas tanto coránicas como rabínicas.
Las primeras comunidades israelitas se establecieron en Tudela desde los primeros momentos de la fundación, probablemente procedentes de Tarazona ante la necesidad de los servicios de artesanos.
Judería Vetula
Parece ser que la población judía llega a Tudela atraída por el fuerte poder político y económico que va adquiriendo la ciudad durante el siglo IX, inmediatamente a su fundación islámica.
Se trata de una judería que ofrece una problemática en su ubicación, ya que tradicionalmente se pensaba que se agruparon en la zona al sureste de la muralla en las proximidades del río Queiles pero las excavaciones arqueológicas de las últimas décadas han desechado este emplazamiento, desplazándola hacia las calles Magallón, Cortés, Huerto del Rey.
Sin duda fue una judería populosa y que vive una época de esplendor muy importante. El legado más importante de la judería vétula de Tudela son los personajes ilustres que nacieron en ella: el viajero Benjamín de Tudela, el polifacético Abraham ben Ezra y el poeta y filósofo Yehudá ha Leví.
Judería Nueva
En el año 1170 el rey de Navarra Sancho VI el Sabio decreta el traslado de la Judería a un nuevo emplazamiento, junto a los muros del castillo, cuya custodia y reparaciones les encomienda a cambio de exenciones de impuestos y concesión de otras prerrogativas, además de facilitarles una mejor protección.
A diferencia de la Judería Vieja, la Judería Nueva está mejor localizada, ya que se dispone de mayor documentación.
Todos los historiadores y arqueólogos la sitúan dentro de los muros del castillo hasta que el aumento de la población hace desbordar estos límites, durante los siglos XIII y XIV, para situarse junto a los barrios de diferentes parroquias cristianas cercanas a la fortificación. San Pedro, San Miguel y San Salvador son nombres de calles y plazas existentes hoy día, hasta donde pudo llegar la población judía, mezclándose incluso con la población cristiana. Se documentan al menos dos sinagogas: la Mayor y la Menor, de cuya ubicación no se tiene noticia. Los documentos citan dos áreas dentro de la judería, conocidas como La Planilla y la Puyada de la Planilla o del Castillo.